Hace tiempo que tenía ganas de concretar esto, mi primer blog, pensaba en usar a Té Regalo como una ruta para llevarlo hacia alguien, y si estás leyendo esto, me hace muy feliz que este primer paso haya llegado hacia ti ♡
Porque ahora es como si todo tuviese que tener una estructura perfecta, esperar a la mejor idea, el momento lugar y hora perfecta, para hacer calzar algo y lanzarlo, y esperar de ello el mejor resultado siempre en números. Pero con tanto cálculo muchas veces empezamos también a sumar días, semanas y años, y muchas veces esas ideas y sueños que tanto nos entusiasmaron, quedan solo en la mente o a medias.
Así que a modo de llevarle la contra a mi propio cerebro que muchas veces me frena con la perfección, estoy escribiendo esto a cualquier hora, un día cualquiera y sin una idea muy clara y lo más importante: con cero expectativas y con muchas ganas de liberar las ganas que tenía de simplemente crear este blog.
Total, he aprendido, gracias a algunos años en este mundo y a este estilo de vida emprendedor, que mejor hecho que perfecto y que no todo se puede controlar, que lo importante en esta vida es experimentar, y en la práctica, ir mejorando siempre que podamos, porque casi siempre tenemos más tiempo del que pensamos para dedicarle a una idea, así que aquí vamos sin apuro y sin sobre pensar tanto.
Tener un proyecto y lanzarlo al mundo es para valientes, y algo que me ha dejado la esta experiencia con mi negocio, ha sido a separarme a mi misma de Té Regalo, para no empujarlo innecesariamente a un lugar donde aún no está preparado para estar, solo para cumplir con las expectativas del resto o incluso las mías, porque cuando vas viendo al rededor negocios que van cerrando e ideas que se van perdiendo, ese miedo a veces es muy constante y piensas: "¿Será mi negocio el siguiente?", por eso, mi mayor cuidado durante estos años ha sido que siga existiendo a su propio ritmo, sin apuros ni comparaciones y sobre todo manteniéndose fiel a lo que hace justo 10 años atrás imaginé: "¿Y si hago tecitos para regalar?".
Porque Té Regalo nació así mismo, con muchas ideas, pero sin una muy clara, y con muchísimos cambios entre medio, que han sido también mis propios cambios, y como la vida está llena de caminos me gustaría recorrer los que más pueda, pero cada uno a su tiempo y siempre muy consciente para aprovechar de vivir cada uno al máximo, sin pensar tanto en lo que viene o en lo que ya pasó.
Así que todo esto, por muy simple que se vea, es un poco un recordatorio de lo que Té Regalo me ha enseñado: que no hay apuro para lograr todo lo que queremos en la vida, que la vida va cambiando y debemos ajustarnos a lo que nos trae, y que es muy importante que las ideas no se queden guardadas.
Este primer post es la bienvenida a este blog, donde con el tiempo iré escribiendo de todo un poco: recetas con los tecitos de Té Regalo, experiencias emprendiendo, ideas, información y todo lo que vaya surgiendo que crea pueda ser de tu interés (eso espero).
Muchas gracias por leer,
¡Hasta la próxima taza! ☕